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Es una situación difícil.
Has sido amigo de alguien durante años, pero ahora ya no quiere hablar contigo.
¿Fue por algo que hiciste? ¿O por algo que no hiciste?
¿Se ha acabado la amistad? ¿Han conocido a un nuevo amigo? ¿Alguien mejor que tú?
¿Se cansaron de hablar? ¿Se cansaron de escuchar? ¿Se cansaron de ser amigos?
Sea cual sea la razón, es un fastidio.
El problema es que a veces las relaciones se vuelven demasiado tensas, y parece que el cierre es inalcanzable.
Esta entrada de blog te mostrará una lista de 16 consejos prácticos que pueden ayudarte cuando alguien ya no quiere hablar contigo.
1) Sea sincero.
Sé honesto y amable.
Cuando alguien te dice que ya no quiere hablar contigo, es fácil entrar en pánico. Más aún, enfadarse.
Es fácil tomárselo como algo personal. Preguntarse qué has hecho mal y si lo hacen para herirte intencionadamente.
Pero antes de reaccionar sin pensar, reflexiona sobre la situación. Piensa en la razón por la que no quieren mantener una conversación contigo.
A veces, ni siquiera se dan cuenta de que no quieren hablar contigo.
Si tienes la culpa, sé sincero.
Si no está en sus manos y hay algo que puedas hacer al respecto, pídelo amablemente y di: "Siento haber causado un problema".
Puede que no lo digan directamente, pero empezarán a confiar en ti de nuevo.
Sin embargo, si no has hecho nada malo y te acercas porque quieres hablar, sé amable.
Pregúntales cómo les va.
Si tu amigo te ignora durante tres semanas, no temas preguntarle amablemente "¿cómo estás?" aunque sepas que no quiere hablar contigo.
Permíteles establecer los límites y respétalos.
No seas insistente. No estés desesperado.
Más bien, demuestre que se preocupa por su bienestar mostrándoles amabilidad y empatía.
Puede parecer una pérdida de tiempo, pero ser amable hace que la situación sea más agradable para ambos.
Con un poco de tiempo, puede que les resulte más fácil bajar la guardia y sincerarse sobre el motivo de su cambio de opinión.
Si se sienten cómodos, puede que algún día vuelvan a dejarte entrar en sus vidas.
2) Sé respetuoso.
La regla de oro: trata a los demás como quieres que te traten a ti.
Sé respetuoso, pero no tengas miedo de decir lo que sientes.
El respeto es algo importante que puede derribar una barrera de tensión.
Puede parecer una tontería, pero funciona.
Respeta sus límites e intenta comprender su situación.
Imagínate esto.
Puede que pienses que te mereces cerrar un asunto, pero tu amigo se niega a hacerlo.
¿Qué debe hacer?
Déjalos estar un momento.
Sin embargo, compruébalo respetuosamente de vez en cuando, y verás que se sentirán más abiertos a hablar del tema contigo.
3) No les presiones.
No insistas, no llames a menudo y no les aceches.
Dales espacio para que reflexionen sobre sus sentimientos.
Cuando tu amigo se encuentre en una situación que le desagrade, no tengas miedo de echarte atrás.
La presión les hace sentirse acorralados y desesperanzados.
Lo mejor es hacerles saber que respetas su decisión y que la respetarás aunque no cambien de opinión.
Mientras tanto, busque un cierre en otra parte.
Dales tiempo para pensar en tu relación con ellos.
A veces, basta con saber que quieren pensar en la relación.
No es necesario decirlo todo de inmediato.
4) Dales tiempo para que lo piensen.
Antes de que te digan que no quieren hablar más contigo, dales tiempo para que piensen en vuestra amistad,
Recuérdales lo que significa y si quieren participar o no.
Cuando la gente está disgustada, aún no está preparada para hablar de ello.
Debes ser paciente y esperar hasta que estén preparados para abrirse.
De lo contrario, todos vuestros esfuerzos fracasarán y no volveréis a veros (o probablemente algo peor).
Espera. Dales tiempo para pensar.
No les presiones. Ahora mismo no quieren hablar, así que no les presiones.
Si pudieran hablar de ello todo el día, lo harían.
Pero lo cierto es que no tienen ganas de hablar en todo el día, así que deberías esperar a que estén preparados para abrirse y entonces hablar de ello con ellos.
Por mucha paciencia que tengas, no debes tener miedo de esperar a que vuelvan en sí.
Si no vuelven, no tienes más remedio que aceptar que ya no quieren hablar.
Pero si vuelven, es que las cosas van mejor y tenéis la oportunidad de volver a ser amigos.
5) Sé proactivo.
No puedes controlar la situación, pero puedes controlar cómo reaccionas ante ella.
Sé proactivo y céntrate en ti mismo. No te culpes por la situación.
Puede que tu amigo haya conocido a otro amigo y te preguntes por qué ya no quiere ser tu amigo.
Pero a tu amigo no le apetece hablar de ello, por ahora, así que no deberías pensar en ello.
En lugar de eso, debes averiguar qué puedes hacer para que quieran volver a hablar contigo.
Piensa en las cosas que le gustan y las que no le gustan de ti.
Probablemente no sea fácil, pero haz todo lo posible por evitar las situaciones que dificultan el diálogo.
Que no quieran hablar no significa que tengas que dejar de hacerlo por completo.
Si necesitan espacio, dáselo. Te lo agradecerán.
Dales tiempo y volverán cuando estén preparados.
Ver también: 15 cosas que hacer cuando odias tu trabajo pero no puedes permitirte dejarloPero averigua qué puedes hacer para que quieran volver a hablar contigo.
Hazles saber que estás a su lado si alguna vez necesitan ayuda.
Demuéstrales que la relación sigue siendo importante para ti, pero no te enfades porque no quieran hablar.
Demuéstrale que respetas su decisión y que tienes otras opciones entre las que puede elegir.
Piensa en ello como una forma de demostrar a tu amigo que no está solo, incluso cuando se siente así.
6) Respeta su decisión.
¿Puedes soportarlo?
¿Qué harías si alguien decidiera no hablar contigo como amigo?
Aunque te digan "déjame en paz" o "no me hables más", respeta su decisión.
Aunque te duela, tienes que respetar su decisión.
Si escarbas lo suficiente, descubrirás que la mayoría de las veces no es lo que parece.
Puede que estén pasando por algo importante y tú no lo sepas.
O puede que simplemente estén ocupados con algo y quieran hablar cuando tengan tiempo.
Cuando alguien quiere hablar, siempre puedes averiguar qué significa y qué es lo mejor que puedes hacer.
¿Crees que tu amigo quiere dar un paseo?
¿Crees que tu amigo quiere ir a por helado?
¿Crees que tu amigo sólo quiere que le dejen en paz?
Nunca se sabe, pero lo único que importa es que respetes su decisión.
¿Por qué te importa tanto la amistad?
Intenta decidir lo importante que es tu amistad y céntrate en ti mismo.
7) Acepta su decisión, pero sé optimista.
A veces, la vida no sale como queremos.
A veces, la gente ya no quiere hablar como amigos.
Así que debemos respetar su decisión y ser optimistas sobre nuestras nuevas situaciones y relaciones.
Eso no significa que tengas que olvidar la amistad por completo.
Si tienes tiempo, piensa qué puedes hacer para que tu amigo vuelva en sí.
No te olvides de tu amistad con ese amigo especial.
Si alguna vez deciden volver a hablar y si alguna vez están preparados, sabrás que es importante.
Si no estás dispuesto a pasar tiempo con ellos, probablemente no sea una buena relación para ninguno de los dos.
Pero si tú lo quieres y ellos lo quieren, no te rindas.
Sigue intentándolo para ver si cambian de opinión.
Intenta por todos los medios que vuelvan en sí.
Demuéstrales que su amistad es importante y que siempre estás dispuesto a hablar.
8) Tómate un descanso.
Esto es muy importante para darte tiempo a calmarte y reflexionar sobre la situación.
A veces, sólo queremos hablar, y a veces es mejor que dejemos las cosas como están durante un tiempo.
Dale a tu amigo algo de espacio y distancia para que puedas reflexionar sobre la amistad.
Si hablas con ellos antes de pensarlo bien, probablemente dirás algo que empeorará las cosas.
Deja las cosas como están por un tiempo. Habla con ellos cuando estés preparado.
Tienes que decidir si quieres que la amistad dure mucho, dadas las circunstancias.
Si crees que merece la pena, hazlo.
9) Cuando te lo digan por primera vez, no reacciones rápidamente.
No reacciones instantáneamente cuando oigas algo como "no quiero hablar más".
Tómate un tiempo para pensarlo.
Piensa en la situación e intenta averiguar por qué tu amigo ha dicho eso.
¿Es porque están amargados?
No lo creo,
Así que puede que quieras preguntarles si están bien.
Si dicen "no", quizá necesiten ayuda o algún tipo de ayuda profesional.
Puedes ponerte en contacto con el orientador o terapeuta en su nombre y darle la oportunidad de desahogarse, sea lo que sea lo que le preocupa.
Quizá no puedas ayudarles de inmediato, pero puedes ayudarles a iniciar el proceso.
Cuando por fin estén preparados para hablar (y digo preparados), tú estarás ahí para ellos.
10) ¡No seas cobarde!
"¿Podemos hablar de esto?".
Sé que puedes tener miedo al rechazo o a que te hagan daño, pero si de verdad te importan y quieres volver a verlos, adelante, diles algo así.
No hay nada malo en decirlo.
Si te dicen que no, sabrás lo que tienes que hacer.
A veces, la gente simplemente no quiere hablar de la situación porque el problema puede ser mayor de lo que se piensa.
Si dicen que "sí", lo más probable es que estén un poco más dispuestos a hablar de ello.
Y cuando lo hagan, escuche con el corazón y la mente abiertos.
11) Dales un poco de tiempo a solas.
A veces, sólo necesitan algo de tiempo para reflexionar sobre la situación.
Cuando estén listos y tengas tiempo, podrás volver a hablar.
Pero ahora mismo, que piensen y decidan lo que quieren hacer.
Probablemente les darías algo de espacio para que pudieran procesar la situación y tomar una decisión sobre si seguir o no con la relación, sea cual sea.
Cuando tu amigo cambie de opinión y decida que quiere volver a hablar, préstale toda tu atención.
12) Intenta comprender sus razones.
El hecho de que les cueste mucho esfuerzo hablar contigo no significa que no te importen en absoluto.
Sin embargo, debes intentar comprender sus razones.
¿Qué motivos tienen para no querer hablar más contigo?
¿Tienen miedo de que les hagan daño?
Si es así, debes explicar lo que ha pasado y cómo te sientes al respecto.
A veces, lo único que necesitan es una disculpa o algún tipo de consuelo.
No puedes ir por ahí pensando que no le importas a tu amigo porque ya no quiere hablar contigo.
Probablemente no sean ese tipo de personas.
Sé amable con tu amigo y hazle saber que te preocupas por él.
Por ejemplo, di: "Entiendo de dónde vienes y siento haberte molestado".
Demuestra que te preocupas por sus sentimientos y que quieres entender por lo que están pasando.
13) Demuéstrales lo importante que es para ti su amistad.
No te rindas tan fácilmente.
Sé la mejor persona y aborda la situación con más madurez.
Los conflictos ocurren todo el tiempo.
Los amigos no siempre se encuentran, pero el vínculo siempre está ahí.
Un pequeño malentendido es algo que hay que superar.
Algunas personas esperan una gratificación instantánea y no comprenden lo importante que es la amistad en la vida.
Pero nunca hay que rendirse.
Demuéstrale a tu amigo que su amistad es importante continuando para comprenderle mejor.
14) Estar a su lado cuando estén preparados.
Si crees que puedes volver a hablar con ellos cuando estén preparados y si te dicen que "sí", entonces estate ahí para ellos.
Sé un amigo y no les dejes colgados.
Esté ahí cuando le necesiten o cuando quieran hablar con usted.
Si no quieren hablar, dedica tu tiempo a otra cosa.
Pero estate siempre preparado para cuando tus amigos te necesiten en momentos de necesidad o crisis.
Recuérdalo siempre.
¡Un amigo necesitado es un amigo de verdad!
15) ¡No se acaba hasta que tú quieres!
Recuerda que el hecho de que no hayas tenido la oportunidad de decir algo no significa que se haya acabado.
Si quieres que se acabe, que se acabe.
Esta es la única oportunidad que tendrás.
Es una buena oportunidad para que veas si tu amigo merece realmente la pena.
Si quieres que se acabe, entonces adelante, termínalo por ti mismo.
Nadie va a hacerlo por ti, así que no esperes a que ocurra algo.
Ver también: 10 formas efectivas de hacer que un narcisista entre en pánicoSi pasa algo, no pasa nada.
Es algo bueno, y es señal de que esa persona te importa de verdad.
Y por último,
16) ¡Está en tus manos!
Si quieres hacer algo, hazlo.
Si quieres disculparte, dilo.
Sólo así mejorarán las cosas para ti.
En este mundo no existen los "si", así que adelante con lo que tengas en mente.
Si estás dispuesto a hacer algo, hazlo.
No te arrepientas de cómo han salido las cosas.
Lo hecho, hecho está, y no tiene sentido lamentarse ahora.
No puedes cambiar el pasado, pero sí el futuro, así que sigue adelante y haz lo que tengas que hacer.
Te sentirás mucho mejor después porque no tendrás que vivir con remordimientos.
Aun así, si te cuesta utilizar todo tu potencial y expresar lo que realmente sientes, te sugiero que veas este excelente vídeo gratuito del chamán Rudá Iandê.
Así fue como aprendí métodos eficaces para lograr lo que quería en la vida. En este vídeo, Rudá comparte su experiencia y nos ayuda a encontrar formas de devolver el equilibrio a nuestras vidas y liberar nuestra creatividad y potencial.
Así que si quieres construir una mejor relación contigo mismo y con la gente que te rodea, empieza ya por consultar sus auténticos consejos.
Aquí hay un enlace al vídeo gratuito de nuevo .
Por último
No hablar con un amigo puede despertar distintos tipos de emociones y hacerte pensar en muchas cosas.
Probablemente tu amigo esté pensando lo mismo que tú, así que trágate tu orgullo y ármate de valor para tenderle la mano.
Después de todo, no tiene sentido añadir confusión a la mezcla.
Enfrentarse a problemas y malentendidos es una verdadera prueba de amistad.
Si merece la pena salvar la amistad, ¡sálvala!
Siga estos 16 consejos y seguro que conservará sus relaciones.
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