Tabla de contenido
¿Empieza a pensar que su cónyuge tiene razón y que debe cambiar antes de que las cosas empeoren?
No tiene por qué ser un escenario de todo o nada.
Hoy puedes dar pequeños pasos que mejorarán la probabilidad de que tu matrimonio se mantenga intacto.
Puede que ellos mismos estén repasando esta lista y aún no te lo hayan dicho.
Prueba estas sencillas sugerencias para salvar tu matrimonio.
1) Aprender a comunicarse mejor
La comunicación es uno de los factores clave de un matrimonio feliz e intacto.
Ocultar tus pensamientos y sentimientos a tu cónyuge es una forma segura de que se sienta desconectado de ti.
Cuando no te comunicas, estás diciendo que lo que pasa en tu cabeza no es importante para ellos. Pueden empezar a sentir que no son importantes para ti, lo que puede provocar sentimientos de resentimiento.
Si no te comunicas bien con alguien, a menudo significa que no se siente valorado o respetado por ti.
Recuérdalo siempre:
Comuníquese cuando las cosas sean fáciles y, sobre todo, cuando sean difíciles.
La forma en que os comunicáis puede acercaros o alejaros.
Es importante aprender las mejores técnicas de comunicación para tener una relación y un matrimonio sanos.
En lugar de buscar respuestas que confirmen tus peores miedos e inseguridades, aprende a explorar soluciones alternativas.
Asegúrese de formular preguntas abiertas que requieran respuestas de más de una palabra.
Esfuérzate por el diálogo, no por los mismos argumentos repetidamente circulares.
Sin embargo, la comunicación es también uno de los principales factores del fracaso matrimonial.
¿Por qué?
No son sólo las palabras lo que se dice, sino también los sentimientos y pensamientos que hay detrás de ellas.
Algunas personas confunden la comunicación con hablar. Es una vía de doble sentido, en la que ambos deben implicarse.
Anime a su cónyuge a compartir sus sentimientos y pensamientos, incluso cuando no esté de acuerdo con ellos. Si quiere hablar de ello, se sentirá escuchado y comprendido.
Cuando puedas hacerlo, dales la sensación de que te escuchan y te entienden, lo que hará que quieran responderte.
De nuevo, no tiene por qué ser un escenario de todo o nada.
2) Comunique sus preferencias, no sólo sus necesidades
"Necesito hablar."
"Necesito ayuda en la casa".
Son necesidades, no preferencias.
¿Te sientes un poco mejor?
Entonces deberías poder decir algo como esto:
"Me gustaría que me llamaras cuando vayas a llegar tarde a casa".
"Me gustaría un abrazo cuando llegue a casa del trabajo".
Son preferencias, cosas que te harían sentir mejor.
Cuando usted y su cónyuge se comunican sanamente, pueden empezar a compartir sus preferencias con facilidad y sinceridad.
Si te comunicas bien, podrás compartirlos con confianza sabiendo que tu cónyuge intentará cumplirlos.
Salga a pasear y hable.
Tómate un fin de semana sólo para vosotros dos.
Trabajen juntos como voluntarios.
Vaya a un lugar nuevo y emocionante en su próxima cita nocturna.
Si puedes compartir tus preferencias de forma segura, fomentarás la confianza y la comunicación abierta en tu relación.
Su cónyuge empezará a sentirse comprendido, respetado y valorado por usted.
3) Sea sincero
Escuche aquí.
Uno de los principales factores que conducen al divorcio es el engaño.
Las personas inician sus relaciones con las mejores intenciones y a menudo no tienen intención de herir nunca a su pareja.
Sin embargo, una vez que empiezas a mentir, ya no hay vuelta atrás.
Si mientes a tu cónyuge, siente que no sabe quién eres, se siente embaucado y engañado.
Puede que no recuerde todo lo que le dijo a su cónyuge, pero recordará cómo se sintió cuando mintió.
Cuando tu cónyuge no puede deducir la verdad de lo que dices, se pone nervioso y desconfía. Se siente emocionalmente desconectado y no es capaz de confiar en ti.
Incluso pueden pensar que eres un mentiroso infiel y que nunca les vas a contar nada.
No se puede evitar.
Entonces, ¿qué debe hacer?
Ante todo, debes ser sincero con tu cónyuge.
Si no, empezarán a confiar menos en ti y sus sentimientos de amor hacia ti disminuirán.
La honestidad es sumamente importante para un matrimonio feliz e intacto. Si no eres honesto, estás poniendo a tu cónyuge en peligro de volverse infeliz y desconfiado.
Intenta compartir tus pensamientos y deseos de forma sincera para ayudar a tus cónyuges a aliviar sus sentimientos de inseguridad.
Puedes hacerlo iniciando conversaciones con estas frases:
"Me gustaría [hacer algo]".
"Disfruto con [esto]" "Aprecio cuando haces [esto]".
¡Toma nota! El engaño no tiene cabida en una relación feliz.
4) Observa tu papel en los problemas
Sé que estarás de acuerdo conmigo en esto.
No hay matrimonio perfecto. No hay cónyuge perfecto. No hay comunicación perfecta.
Hay que trabajar para conseguirlo y mantenerlo sano.
Si tu matrimonio lleva un tiempo estancado, puedes estar seguro de que ambos estáis contribuyendo al problema.
Es hora de que ambos lo aceptéis y empecéis a hacer cambios juntos. Si una persona no está dispuesta a asumir el control, entonces algo tiene que cambiar.
Puede que usted no sea perfecto y su cónyuge tampoco, pero la pareja no es del todo mala.
Sería estupendo que nunca te pelearas con tu cónyuge, pero no todos podemos ser cónyuges perfectos.
Echa un vistazo a tu comportamiento e intenta pensar en formas de mejorar.
Por ejemplo, si te das cuenta de que no sueles comprometerte con tu pareja, intenta ser más flexible.
Piensa en cómo actúas y qué comportamientos podrían ser mejores para asegurarte de que las necesidades de ambos están cubiertas en el matrimonio.
Otra forma de abordar la situación es aprender a responsabilizarte de tu parte en los problemas de tu matrimonio.
Nadie tiene más culpa.
Si ambos están dispuestos a dejar de lado sus propios intereses, quizá puedan encontrar lo que ha funcionado para las parejas que se han divorciado o están a punto de hacerlo.
Podréis hacerlo si sois capaces de admitir vuestros fallos y pediros perdón mutuamente.
Nadie es perfecto en una relación, así que no seas duro contigo mismo por no serlo.
5) Satisfaga las necesidades de su cónyuge
Este es el "gran tema" del matrimonio.
Pon todo de tu parte para satisfacer sus necesidades, porque así sentirá que no le engañan.
Si no puedes satisfacer las necesidades de tu cónyuge, encontrará a alguien que sí pueda.
No dejes que esto ocurra.
Además, te centrarás y centrarás más en tu matrimonio si le das a éste todo lo que tienes.
Esto generará confianza en su relación.
¿Y qué sabemos de la confianza?
Es uno de los factores más importantes para un matrimonio duradero.
Ten cuidado con la forma de decir "sí, quiero". Es importante encontrar las palabras adecuadas para tu cónyuge.
Comuníquese eficazmente con su cónyuge manteniendo discusiones productivas. Podrá hacerlo si se centra en las necesidades de su cónyuge y no en las suyas propias.
Si lo haces, podrás tener una visión más amplia de lo que ocurre en la relación.
Además, asegúrate de que te conviertes en una persona con la que tu cónyuge quiere estar.
Es fácil pensar que uno puede arreglárselas con lo que aporta a la relación, pero muchas personas no se dan cuenta de lo mucho que necesitan la ayuda de su cónyuge.
Dar es una calle de doble sentido. No sólo hay que dar, también hay que recibir.
6) Aprende a ser vulnerable
¿Le asusta demasiado mostrar debilidad delante de su cónyuge? ¿Como si eso le hiciera pensar menos de sí mismo?
¡Esto es un gran no-no!
Si necesitas ayuda, permítete ser vulnerable. Sé capaz de confiar en tu cónyuge.
No tengas miedo de ser vulnerable y no temas el riesgo que conlleva.
Una de las principales razones para que un matrimonio tenga éxito es ser vulnerables el uno con el otro.
Es muy importante compartir lo que uno siente con el otro.
Es una de las cosas más íntimas que pueden hacer dos personas.
Es señal de que quieren estar juntos, quieren amarse y no temen ser rechazados por la otra persona.
Es señal de que quieren responsabilizarse de su parte en la relación y encontrar formas de mejorarla.
¿Cómo puede hacerlo?
Una simple declaración honesta bastará.
"Me resulta difícil hablar de dinero contigo".
Si te muestras abierto sobre tus sentimientos y pensamientos, te sentirás menos cohibido a la hora de decir lo que realmente piensas, lo que dará a la otra persona una sensación de seguridad y confianza.
Cuanto más sepa su cónyuge lo que usted piensa, más probable será que comparta sus sentimientos y pensamientos.
Asegúrate de comprender las necesidades y deseos de tu cónyuge y aprende a satisfacerlos plenamente.
Puede aprender a hacerlo haciendo preguntas que muestren interés por su situación, lo que le ayudará a sentirse mejor con su matrimonio.
7) Aprender a intimar
La intimidad es un factor clave para mantener el matrimonio feliz y unido.
Cuanto más íntimo sea vuestro matrimonio, más felices seréis. Tenéis que aprender a intimar el uno con el otro.
No hay manera fácil de hacerlo.
Aparte de la cercanía física, tú y tu cónyuge también debéis compartir lo que pensáis. Ésta es otra forma de intimidad.
Una forma de hacerlo es hablar de las cosas difíciles de la relación.
Por ejemplo, compartir los sentimientos es difícil cuando uno de los cónyuges no se atreve a hablar de sus sentimientos más profundos y a compartirlos con el otro.
Puedes preguntar,
"¿Qué necesitas de mí?"
Asegúrese de entender lo que quiere su cónyuge.
Esto ayudará a determinar si estás dando todo lo que tienes, o dando la mitad de lo que se merecen.
Asegúrate de que tanto tú como tu cónyuge os sentís respetados en la relación.
Sabrás si es así cuando confíen en tu capacidad para tomar decisiones con seguridad y cuando respeten tu punto de vista.
Además, si confían en su capacidad para ser el líder de la relación, estarán más dispuestos a seguir sus consejos, lo que garantizará una mayor probabilidad de éxito en su matrimonio.
8) Sé amable con los demás
¿Le gusta pelearse con su cónyuge? ¿Disfruta menospreciando al otro? ¿Cree que esto también les divierte?
Si este es el caso, considera cuántas veces os estáis prestando atención negativa el uno al otro.
No importa si se lo merecen o no.
Aún así se lo tomarán y se enfadarán contigo. ¡PARA CON ESTO!
Trata a los demás como te tratas a ti mismo. No hay forma fácil de decirlo.
Aunque te resulte difícil, debes esforzarte por poner bondad en tu matrimonio.
La amabilidad es otra forma de intimidad. Fortalece el matrimonio y es una forma estupenda de conseguir lo que quieres de tu cónyuge.
Sean amables cuando hablen entre ustedes y sean amables cuando discrepen sobre ciertos temas.
Tened paciencia, sed tiernos los unos con los otros, especialmente en los momentos en que los problemas parecen abrumadores.
Trabaja para construir unos cimientos sólidos para tu matrimonio.
Utiliza los ejemplos de tu relación, así como los de amigos, familiares y parientes.
Pregúntate qué haces que te convierte en un buen cónyuge o amigo.
Esto le ayudará a entender cómo ser un buen cónyuge, incluso cuando las cosas no van bien en su matrimonio.
Y recuerda esto:
Nunca nadie se arruinó por dar a su matrimonio.
Puede que tengas que renunciar a algunas cosas por tu matrimonio, ¡pero la recompensa merece la pena!
9) ¡Aprended a divertiros juntos!
Divertirse juntos es otra forma de fortalecer el matrimonio.
Aprender a divertiros juntos os ayudará a intimar más.
Divertiros fortalecerá vuestro matrimonio y os ayudará a tener una mejor comunicación. Os permitirá sentiros más a gusto el uno con el otro y hará que la relación sea más fuerte.
Es una situación en la que todos salen ganando porque, cuando su cónyuge se siente bien, es más probable que le dé lo que usted quiere en forma de tiempo, afecto y apoyo.
Presta atención a lo que te hace reír.
Ver también: 10 señales de advertencia de que un hombre casado es un jugador¿Qué cosas os gusta hacer juntos?
Toma estas actividades y haz que formen parte de tu matrimonio. Es importante mantener feliz a tu cónyuge para tener un matrimonio feliz.
Sin embargo, esto es especialmente duro después de que nazcan los niños, ¡pero sigue siendo muy importante!
Estos pequeños cambios no requieren una revisión radical de la personalidad ni grandes cambios en la vida.
Mucha gente conoce los peligros de tener demasiado tiempo libre, pero es fácil olvidar las muchas formas en que esto puede destruir un matrimonio.
Todos necesitamos actividades estructuradas en nuestras vidas.
Eso significa que si queremos mantener nuestros matrimonios unidos y sanos, debemos poner el mismo empeño en mejorarnos a nosotros mismos.
Asegúrate de hacer todas estas cosas JUNTAS, no SOLAS.
10) Rodéense de gente positiva
Rodearte de gente positiva te ayudará a mantener unido tu matrimonio.
Las personas positivas son buenas para tu matrimonio, mientras que las negativas son malas. ¡Es más fácil mejorar dentro de un entorno mejorado!
Las personas positivas te construirán y te enseñarán a apreciar de nuevo la vida. También pueden ayudarte en los momentos más difíciles.
Puedes aprender lo que hacen bien para que sus matrimonios sigan creciendo.
Rodéate de otros matrimonios que estén pasando por lo mismo que tú y asegúrate de que les va bien en su matrimonio.
Esto le dará una visión positiva de su matrimonio y le ayudará a superar cualquier problema que surja.
Si descubre que tiene problemas con su cónyuge, busque ayuda en personas que también hayan experimentado problemas en sus matrimonios.
Puede que no sea fácil, pero es una forma segura de dar la vuelta a cualquier mala situación matrimonial.
Es importante recordar que, a veces, cuando nos rodeamos de personas negativas a las que no les va bien en sus matrimonios, acabaremos sintiéndonos igual o simplemente nos contagiaremos de su mala actitud.
Y eso no es lo que queremos! Aspirar a tener la misma relación sana.
Necesitamos personas a nuestro alrededor que nos inspiren a ser felices y que nos ayuden a amar a nuestros cónyuges cuando las cosas se ponen difíciles.
Personas que también tienen en cuenta nuestros mejores intereses y están dispuestas a apoyarles a usted y a su cónyuge en su matrimonio.
A veces, es bueno tener un tercer par de ojos que miren tu matrimonio para guiarte hacia una vida matrimonial exitosa.
11) Aprenda a celebrar los éxitos de su cónyuge
Es importante aprender a prestar atención y celebrar los éxitos de tu cónyuge.
Apóyeles en su afán de superación e interésese por sus metas y sueños.
Asegúrate de escucharles cuando hablen de sus metas y sueños, no les ignores ni finjas que no te importa lo que tienen que decir.
No te ofendas personalmente cuando no entiendas algo de lo que te están hablando.
En lugar de discutir, aprendan unos de otros y trabajen en equipo.
No es lo más excitante del mundo, pero es una buena forma de sentirse más cerca e intimar más. Fortalecerá su matrimonio porque sabrá que le aprecian de verdad.
También te ayudará a crear una situación beneficiosa para ambos, en la que ambos os sintáis bien y satisfechos el uno con el otro.
Hágalo con la mayor frecuencia posible.
Esto es algo que muchas parejas olvidan hacer.
No queremos parecer celosos o indiferentes, pero lo somos cuando se trata de los éxitos de nuestros cónyuges. Queremos parecer felices y solidarios, y ésta es una buena forma de hacerlo.
Asegúrate de que tu cónyuge sepa que estás orgulloso de él.
Felicíteles sinceramente por su éxito, pero tampoco exagere.
Al igual que todos los demás consejos matrimoniales mencionados anteriormente, éste requiere mucha práctica para perfeccionarse y tener éxito.
Celebre los éxitos, por pequeños o grandes que sean.
Esto reforzará sin duda el vínculo entre usted y su cónyuge.
Y finalmente...
12) Haz saber a tu cónyuge que quieres que el matrimonio funcione
No hay forma más fácil de que un matrimonio funcione que ser abierto sobre el deseo de que funcione.
Para mantener su matrimonio sano y fuerte, debe hacer saber a su cónyuge que desea que el matrimonio funcione.
Hable con ellos, demuéstreles que le importan y cumpla lo que les dice.
Asegúrate de hablar con amabilidad.
No exagere ni presione a su cónyuge para que haga algo que no desea.
Ten fe en que todo saldrá bien. Confía en que tu cónyuge siente y hace lo mismo.
Además, hazlo comunicándote y siendo sincero con ellos.
Cuanto más comprendáis y respetéis las necesidades del otro, más probabilidades tendréis de que vuestro matrimonio dure toda la vida.
También es importante que tengáis un vínculo y una conexión fuertes.
¿Y cómo se hace esto?
Estar el uno para el otro tanto como sea posible es la clave para mantener vivo el matrimonio.
Hay que trabajar juntos en todo.
Recuerda que cuanto más te esfuerces por mejorar tu matrimonio, más feliz y sano será en el futuro.
Conclusión
¡Y ahí lo tienes!
Ver también: 11 señales espirituales de que alguien te echa de menosDebes recordarlo.
Que tengas problemas en tu matrimonio no significa que seas un fracasado.
Todo el mundo se enfrenta a contratiempos y desafíos en su matrimonio en algún momento.
Los desacuerdos y las peleas son normales en una relación.
Puede que nunca piense que estos pequeños problemas le llevarán al divorcio, pero lo hacen.
Sin embargo, ambos deben ser receptivos a los sentimientos y pensamientos del otro.
Aprende a perdonar. Os cambiará a los dos para mejor.
El matrimonio es una obra en construcción cuyo futuro depende de ti y de tu cónyuge.
La cuestión es:
¿Estás dispuesto a luchar por ello?