25 maneras de lidiar con alguien que te odia sin motivo (consejos prácticos)

25 maneras de lidiar con alguien que te odia sin motivo (consejos prácticos)
Billy Crawford

No se puede gustar a todo el mundo.

Hagas lo que hagas, o te esfuerces lo que te esfuerces, lo más probable es que te cruces con alguien a quien le caigas mal.

Si te encuentras ante un escenario en el que te ves obligado a estar en compañía de una persona que te odia, no todo está perdido.

Este artículo revela 25 consejos prácticos para lidiar con los haters.

Comencemos.

1) No pierda la calma

Si te encuentras en la incómoda y desagradable situación de tener que estar en compañía de alguien que te cae mal, puede ser un poco desconcertante.

Pero no hay por qué alarmarse.

Continúa como de costumbre y actúa con naturalidad (aunque te estés muriendo por dentro).

Ver también: ¿Qué es la autoindagación espiritual? Todo lo que necesita saber

Si mantienes la calma y actúas como si no pasara nada, los que te odian pensarán que no te importa lo que tengan que decir.

Incluso si estás legítimamente molesto, no lo muestres. Seguro que les volverás locos.

2) No reaccione ante los "disparos"

El que te odia hará todo lo posible por meterse en tu pellejo.

Es una táctica que utilizan para sacarte una reacción.

Un pequeño pinchazo aquí y un comentario sarcástico son sus armas preferidas porque quieren que reacciones.

Cuando alguien que te odia te haga sombra, ignóralo.

Como dice el refrán, si no tienes nada bueno que decir, no digas nada. Que éste sea tu mantra.

Quedarse callado y no decir nada demuestra madurez y también confunde a quien te odia.

¿Por qué?

Porque cuando respondes con palmas les estás dando una oportunidad.

Guarda silencio y no les des satisfacción.

3) Que así sea

¿Qué puede hacer para que todo sea menos incómodo y desagradable?

Empieza por ti mismo. Deja de buscar soluciones externas para solucionar tu vida, en el fondo, sabes que eso no funciona.

Y es que hasta que no mires en tu interior y desates tu poder personal, nunca encontrarás la satisfacción y la plenitud que buscas.

Lo aprendí del chamán Rudá Iandê. Su misión en la vida es ayudar a las personas a restablecer el equilibrio en sus vidas y desbloquear su creatividad y potencial. Tiene un enfoque increíble que combina técnicas chamánicas antiguas con un toque moderno.

Ver también: "¿Quién soy?" La respuesta a la pregunta más definitoria de la vida

En su excelente vídeo gratuito, Rudá explica métodos eficaces para conseguir lo que quieres en la vida, incluido cómo no dejar que un odioso te afecte.

Así que si quieres construir una mejor relación contigo mismo, liberar tu infinito potencial y poner la pasión en el centro de todo lo que haces, empieza ahora mismo echando un vistazo a sus auténticos consejos.

Aquí tienes de nuevo el enlace al vídeo gratuito.

4) Averigua cómo comunicarte con ellos

Mira, lo entiendo.

El que te odia puede ser alguien con quien trabajas y estás obligado a comunicarte con él.

Si este es el caso, tendrás que encontrar una solución.

Debes encontrar la manera de comunicarte con ellos con calma y sangre fría.

Trate de evitar la confrontación y utilice frases con "yo".

Cosas como "Cuando usas un lenguaje inapropiado a mi alrededor, siento que me estás deshumanizando"

A continuación, haz una pausa y espera a que respondan.

Sé todo lo concreto que puedas y no caigas en la tentación de dejarles de lado cuando te respondan.

Escúchales y escucha lo que tienen que decir. Puede que sus razones tengan alguna validez, puede que no.

Al menos concédales la oportunidad.

5) Aprende a ser civilizado

Ser amable y cortés con todo el mundo es una buena actitud general y es esencial cuando tratas con alguien que te odia.

Tratar a todo el mundo con respeto y dignidad es lo más civilizado que puedes hacer, así que sé amable.

Los gestos amables que fomentan la buena voluntad siempre son útiles, ya que demuestran que eres la persona más importante.

Cuando tratas a los que te odian con elegancia y aplomo, demuestras integridad.

Recuerda, los modales hacen al hombre, en un mundo donde puedes ser cualquier cosa.

Elige ser civilizado.

6) Elige bien tus batallas

A veces hay que saber cuándo retirarse.

Discutir con alguien que ya te la tiene jurada es como atravesar un campo de minas.

Una explosión en cualquier momento es inminente.

La mayoría de los problemas son situacionales y no requieren ninguna confrontación, por lo que básicamente se resuelven solos.

No caigas en la tentación de reaccionar cuando te sientas provocado, porque lo más probable es que no salga bien debido a tu elevado estado emocional.

Lo mejor que se puede hacer en caliente es hacer una pausa y decir algo así como "Ahora no es el mejor momento para hablar de esto". Quedemos más tarde.

Verás que ambos os calmáis después de que haya pasado algún tiempo y tendréis la capacidad de tratar el asunto como los adultos maduros que sois.

7) ¡Finge hasta que lo consigas!

Mantener la compostura no siempre es fácil, sobre todo cuando estás con alguien que te pone de los nervios.

Si no puedes ganarles, deberías tirarte un farol.

A veces, tendrás que fingir una actuación digna de un Oscar. Pon tu mejor cara de póquer y no les des nada.

Esencialmente, te estás distanciando emocionalmente de ellos cuando haces esto, lo cual es una gran manera de darte espacio cuando sientes que te vas a deshacer.

8) Controle sus emociones

Contrólate antes de destrozarte.

Aunque mantener a alguien a distancia puede ser una buena solución a corto plazo, no lo es a largo plazo, sobre todo si esa persona es un elemento cotidiano en tu vida.

Está muy bien desconectar y distanciarse emocionalmente, pero no hasta el punto de ignorarlos al 100%.

Porque podrías perderte los matices cuando vuelvan a intentar presionarte.

¿Qué hacer?

Pues bien, cuando esa persona empiece a cabrearte, toma nota de cómo te sientes por dentro.

Pero lo entiendo, dejar salir esos sentimientos puede ser difícil, sobre todo si has pasado tanto tiempo intentando controlarlos.

Si es así, te recomiendo que veas este vídeo gratuito sobre respiración, creado por el chamán Rudá Iandê.

Rudá no es otro autoproclamado coach de vida. A través del chamanismo y de su propio viaje vital, ha creado un giro moderno a antiguas técnicas curativas.

Los ejercicios de este estimulante vídeo combinan años de experiencia en respiración y antiguas creencias chamánicas, diseñadas para ayudarte a relajarte y a ponerte en contacto con tu cuerpo y tu alma.

Después de muchos años de reprimir mis emociones, el flujo dinámico de la respiración de Rudá reavivó literalmente esa conexión.

Y eso es lo que necesitas:

Una chispa que te reconecte con tus sentimientos para que puedas empezar a centrarte en la relación más importante de todas: la que tienes contigo mismo.

Así que si estás listo para retomar el control de tu mente, cuerpo y alma, si estás listo para decir adiós a la ansiedad y el estrés, echa un vistazo a sus auténticos consejos a continuación.

Aquí tienes de nuevo el enlace al vídeo gratuito.

Una vez que sepas de qué se trata, tómate un momento para reconocerlo, haz una pausa y concédete un poco de espacio para resolverlo. Cuando puedas, resuelve el problema y vuelve a ser tú mismo.

9) No se deje intimidar

Cuando alguien que te odia te trata mal, es fácil querer ceder y hacer todo lo que te pidan.

Esto es un error.

Intentan utilizar su poder sobre ti en tu contra e intentan arrinconarte.

¿Cómo tratar a un acosador?

Adelante.

Mantente firme y deja claro que no te verás obligado a hacer algo con lo que no te sientas cómodo.

Si le caes mal a alguien, no dejes que controle tu vida ni que dicte lo que puedes o no puedes hacer.

Si les disgusta algo de tus acciones, no cambies lo que eres por ellos.

10) No te avergüences de admitirlo

Si estás en compañía de alguien a quien le caes mal, no te avergüences de admitirlo.

Sácalo todo a la luz y airea los trapos sucios si es necesario.

Hazles saber que tienen razón y que tienen un motivo válido para que no les gustes. Si es así.

Sin embargo, si no tienen ninguna razón plausible para odiarte y tú lo admites, probablemente acabarán sintiéndose como unos gilipollas.

11) No intente cambiarlos

Es muy poco probable que la persona a la que le caes mal cambie su opinión sobre ti.

No puedes obligarles a que te quieran y, si no lo hacen, no es culpa tuya.

Así que no caigas en la tentación de hacerles la pelota o intentar ganártelos si tus esfuerzos anteriores han sido inútiles.

Si no les has hecho nada y te odian, que quede en sus conciencias.

Lo mejor que puedes hacer es ser civilizado y dejar de preocuparte tanto por ello.

12) No confundas la crítica con el odio

Esta es específicamente para lidiar con un jefe que constantemente te critica.

Que a alguien no le guste algo de ti no significa que te odie como persona.

Si critican tu trabajo, tómatelo como una crítica constructiva y aprende de los comentarios para que la próxima vez que hagas un proyecto similar, sea mejor que el anterior.

Si eres como yo, a menudo siento que me atacan u odian cuando me critican por algo.

Es la naturaleza humana.

Lo que he aprendido es que...

13) No dejes que te afecten

Es más fácil decirlo que hacerlo, pero hay que tener la piel gruesa cuando se trata de alguien que odia.

No dejes que el hecho de que te odien afecte a quién eres.

La verdad es que no te conocen de verdad y si les caes mal no es por lo que eres, sino por lo que piensan de ti.

Si te molesta, puedes demostrarles quién eres. Hazles una invitación instándoles a pasar tiempo contigo, diablos, ofrécete a invitarles a comer.

Puede que cambien de opinión, puede que no. Si después experimentan tu verdadero yo, puede que su actitud cambie.

Si no es así, no merecen tu tiempo.

14) No guarde las distancias

Sobre todo si no estás obligado a pasar tiempo con esa persona.

Puede ser un amigo, un ser querido o un familiar que piense que eres tóxico.

Que le caigas mal a alguien no significa que la amistad se haya acabado o que vuestra relación deba cambiar.

Si a un amigo no le gusta algo de tu personalidad, aprende a aceptarlo y mantente fiel a ti mismo, pero no lo apartes completamente de tu vida cuando lo único que hace falta es un poco de equilibrio.

15) No te quedes cuando no sean razonables

Si alguien no es razonable o es una persona tóxica, lo mejor es alejarse de él.

Si sientes que te tratan injustamente y que la amistad con esa persona no es sana para ti, lo mejor es romperla.

Esto es especialmente importante si trabajas con esta persona. Si notas que estar cerca de ella es demasiado para soportarlo, habla. Sobre todo si empieza a afectar a la calidad de tu trabajo o, a tu salud mental.

Habla con un supervisor, director o representante de recursos humanos y averigua si pueden apartar a esta persona de ti o trasladarte a otro lugar.

16) No te metas en su drama

A los que odian les encanta el drama y los cotilleos.

También disfrutan haciéndote quedar mal a los ojos de los demás.

Lo viven y lo único que quieren es verte sudar. También intentan utilizar el drama para hacerte caer en sus jueguecitos enfermizos.

Si alguien tiene un problema contigo, no te metas en su drama.

No trates de cambiar quién eres por ellos ni de caerles bien.

Lo mejor que puedes hacer es mantenerte al margen de su drama y ser fiel a ti misma.

17) No dejes que afecten a tus relaciones con otras personas

Que le caigas mal a alguien no significa que le caigan mal todos tus amigos o que le caigan mal todas las personas que te gustan.

Que a una persona no le guste otra no significa que tenga algo en contra del resto del grupo.

Tienen sus opiniones y sus razones, y tienen derecho a tenerlas.

No dejes que el desdén de alguien te impida ser amigo de personas que te importan y con las que disfrutas pasando el tiempo.

Los verdaderos amigos te apoyarán en las buenas y en las malas. Si están siendo envenenados por un odioso, quizá no deberías ser su amigo.

18) No dejes que afecten a tu confianza

Si alguien dice cosas malas de ti, no dejes que eso afecte a cómo te sientes contigo mismo.

Si dicen cosas negativas de ti, es por algo que piensan o por algo que no les gusta de ti.

No dejes que su opinión cambie lo que eres o lo que quieres ser. Si a alguien no le gusta algo de ti, no debería afectar en absoluto a tu autoestima.

Sé que es difícil. Todos queremos serlo todo para todos.

A veces, simplemente no es posible.

Lo mejor que puedes hacer ante una persona que te odia es rebosar confianza en ti misma. Deja que irradie y que vean que no te afectan en absoluto.

19) No dejes que afecten a tu felicidad

Si le caes mal a alguien, no dejes que afecte a tu felicidad.

Si dicen cosas negativas de ti, es su problema y no el tuyo.

Nadie debería tener el poder de hacerte infeliz a menos que sea algo que hagas por ti mismo.

Así que si a alguien no le gusta cómo eres, no dejes que afecte a tu felicidad o a lo que sientes por ti mismo.

Mantente fiel a lo que eres y a lo que te hace feliz.

20) Mirar hacia dentro

A veces dejamos que nuestro ego se interponga.

Por ejemplo, a veces permitimos que los celos o la envidia se interpongan en nuestras relaciones., En esta situación, explorar tus sentimientos sería lo mejor que podrías hacer.

El resentimiento puede estar influyendo en tu forma de tratar a esta persona.

Otro error común es malinterpretar las acciones de alguien o leer en ellas segundas intenciones.

Pregúntate qué experiencia ha tenido esa persona contigo que haya podido influir injustamente en su percepción de ti.

Quizá conocer sus prejuicios o ideas preconcebidas pueda ayudarte a suavizar las cosas.

Un primer paso importante para resolver un problema es admitir que compartes parte de la culpa.

21) Conoce tus límites y cíñete a ellos.

Los límites son algo que todo el mundo debería tener, pero si no sabes cuáles son los tuyos, es fácil que otros los crucen sin ni siquiera saberlo.

Nuestros límites son los que nos dicen cuándo estamos hartos de algo o cuándo alguien está siendo demasiado insistente.

Cuando no conocemos nuestros límites, es fácil que otros los traspasen sin darse cuenta. Si no sabes dónde están tus límites, ¡aprende a ponerlos!

Los límites son importantes para todos. De nosotros depende entenderlos y respetarlos.

No tengas miedo de lo que los demás piensen de ti, porque puedes elegir no escuchar o no hacer lo que no quieres hacer.

22) Hable con alguien de confianza

No puedes asumirlo todo tú solo. A menudo, eso te deja más frustrado y aislado que antes.

En lugar de eso, busca apoyo. Confía en un amigo de confianza y cuéntale todo sobre esa persona que te odia.

Estarás en un espacio seguro y te dará la plataforma que necesitas para desahogarte, airear tus quejas y, además, te ofrecerán algún sabio consejo.

Si el problema es con un compañero de trabajo, ¿por qué no te diriges a un mentor o a un compañero de trabajo y les preguntas cómo abordarían el asunto?

A veces, el mero hecho de que alguien reconozca por lo que estamos pasando puede ser útil.

Puede que obtengas una nueva perspectiva sobre cómo tienes que tratar a este odioso.

23) Céntrate en ti mismo

La conclusión es que sólo tienes control sobre ti mismo y tus acciones.

En lugar de obsesionarte con lo mal que le caes a alguien o lo mal que te hace sentir contigo mismo, céntrate en tu estrategia para tratar con esa persona.

Esto es un proceso y llevará algún tiempo. Crecerás como persona y aprenderás a tener más confianza en ti mismo.

De lo contrario, acabarás atrapado en un ciclo negativo de pensamiento y comportamiento del que es difícil liberarse.

24) ¡Descansa!

Tratar con los que odian puede ser agotador y estresante.

Cuando te enfrentas al estrés, es importante descansar lo suficiente.

Esto puede ayudarte a restablecer tu mente y tu cuerpo y darte la energía que necesitas para afrontar estos problemas de la mejor manera posible.

También es importante que estés bien descansado para que puedas pensar con claridad sobre cómo afrontar tu situación.

Cuando estamos cansados y faltos de sueño, no podemos pensar con claridad en nada y estamos naturalmente más agotados y confusos.

Por otra parte, cuando estamos bien descansados, podemos tomar mejores decisiones.

25) Recuerda que las cosas cambian

La gente cambia.

Crecen y se convierten en personas diferentes de las que eran cuando las conociste.

Puede que hayan cambiado por una razón o puede que hayan cambiado porque simplemente no son la persona que pensabas que eran.

Tienes que aceptarlo y seguir adelante con tu vida lo mejor que puedas.

Conclusión

Esta lista no es exhaustiva y hay muchas otras cosas que puedes hacer para tratar con la gente que te cae mal.

Éstas son sólo algunas de las cosas más importantes que he aprendido a lo largo del camino.

¿Cuál es la clave?

Sé educado y amable con todo el mundo.

Nunca se sabe por lo que está pasando otra persona en su vida y hasta qué punto algo pequeño que hagas por ella puede alegrarle el día.




Billy Crawford
Billy Crawford
Billy Crawford es un escritor y bloguero experimentado con más de una década de experiencia en el campo. Le apasiona buscar y compartir ideas innovadoras y prácticas que puedan ayudar a las personas y las empresas a mejorar sus vidas y sus operaciones. Su escritura se caracteriza por una combinación única de creatividad, perspicacia y humor, lo que hace de su blog una lectura interesante y esclarecedora. La experiencia de Billy abarca una amplia gama de temas, incluidos los negocios, la tecnología, el estilo de vida y el desarrollo personal. También es un viajero dedicado, habiendo visitado más de 20 países y contando. Cuando no está escribiendo o viajando por el mundo, a Billy le gusta practicar deportes, escuchar música y pasar tiempo con su familia y amigos.