10 señales de que tienes una amistad enredada (y qué hacer al respecto)

10 señales de que tienes una amistad enredada (y qué hacer al respecto)
Billy Crawford

¿Tienes amigos tan íntimos que nada -ni siquiera tu crecimiento personal- puede interponerse entre vosotros?

Si es así, puede que estés en una situación de amistad enredada, pero no lo celebres ahora: estar en una situación de amistad enredada significa que tienes a alguien de quien puedes depender, pero también significa que estás dispuesto a olvidarte de tus necesidades para complacer a esa persona.

¿Te suena?

La verdad es que un amigo enredado es alguien cuyas necesidades y deseos están tan entrelazados con los tuyos que su relación parece la de una pareja romántica, pero sin romanticismo.

Entonces, ¿cómo saber si tienes una amistad enredada?

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Permíteme hablarte de 10 señales que te ayudarán a saber si tienes una amistad enredada y qué puedes hacer al respecto.

1) Sacrificas tu tiempo y energía para complacer a esta persona

¿Quieres saber cuál es el signo más evidente de que estás en una amistad enredada?

Es el hecho de que estás constantemente dando y dando a esta persona. Es como si estuvieras haciendo todo lo posible para asegurarte de que está bien.

A veces pasas tiempo con ellos aunque no quieras. Otras, haces cosas por ellos que no quieres hacer.

Incluso cuando no tienes tiempo para tu pareja, tu familia o incluso para ti mismo, esa persona está siempre en lo más alto de tu lista de prioridades.

Admítelo.

Lo haces porque quieres complacerles y hacerles felices, pero también te hace sentir bien contigo mismo.

¿Cuál es el problema?

El problema es que, en una amistad enredada, no está bien que tu amigo tenga su propia vida o haga cosas por su cuenta: necesita tu atención y aprobación constantes.

Como resultado, sientes que no eres suficiente si no haces nada por esa persona.

Esto puede llegar a ser tan abrumador que acabes perdiendo la cordura.

Pero realmente no quieres convertirte en un mártir por este amigo, ¿verdad?

Si es así, ha llegado el momento de la pausa.

Pero antes, asegúrese de que no se está engañando a sí mismo.

Esto puede ser difícil, pero estoy seguro de que si lo piensas correctamente, encontrarás la fuerza para hacerlo.

2) Te sientes resentido después de salir con este amigo

¿Has notado alguna vez que te sientes resentido después de pasar tiempo con tu amigo enredado?

Permítanme explicarles por qué ocurre esto.

Te sientes resentido porque no te tratan como a un individuo que tiene sus propias necesidades y deseos, sino que eres tú el que siempre tiene que ocuparse de los deseos de tus amigos y cumplir sus objetivos.

¿Le suena familiar?

Si es así, lo más probable es que tu amigo enredado no te esté dando el espacio que necesitas para ser tú mismo.

Pero tener un espacio privado es importante para cualquier tipo de relación.

Al menos, eso es lo que demuestran los estudios: las personas que disponen de espacio personal en otro tipo de relaciones interpersonales dicen estar más satisfechas, lo que a su vez se traduce en una mayor calidad de vida y un mayor bienestar emocional.

Pero tu amigo enredado siempre te hace sentir resentido después de salir, ¿verdad?

Esto se debe a que estás acostumbrado a renunciar a tus necesidades y deseos para complacer a esa persona. Y por mucho que lo intentes, es difícil fingir que a veces no te sientes resentido.

Así que, aquí está la cosa:

Esta podría ser la mayor señal.

Te sientes resentido después de salir con ese amigo y, sin embargo, sigues viéndolo ¿Por qué?

Quieres hacerles felices, aunque eso te haga infeliz a ti. Quieres complacer a ese amigo, aunque ese amigo no esté dispuesto a complacerte a ti. T

Sientes que no estás recibiendo lo que mereces de esa amistad y estás resentido por ello.

Estás resentido con esa persona, pero sigues viéndola igual. Sientes que no tienes otra opción.

¿Cómo afrontar esta situación?

Sé sincero con tu amigo y hazle saber que su excesiva necesidad te está poniendo las cosas difíciles.

Dales la oportunidad de cambiar pasando un tiempo separados para que se conozcan mejor y, con suerte, se vuelvan más independientes.

3) Tu autoestima está determinada en gran medida por tu amigo

Permítame hacerle una pregunta importante.

¿Cuáles son algunos de los factores que determinan su autoestima?

Aunque tu capacidad para hacer amigos, tu aspecto físico e incluso tus logros pueden ser factores que contribuyan, apuesto a que el factor más importante es la opinión de tus amigos.

Esto es especialmente cierto si tienes una amistad íntima, porque es probable que te sientas validado, querido y aceptado por ese amigo.

Suena como tú, ¿verdad?

Si tienes una relación estrecha con un amigo, estás dispuesto a hacer cualquier cosa para complacerle.

Y precisamente por eso se convierte en la persona más importante de tu vida: porque valida tu valía como persona.

En palabras sencillas, tu autoestima viene determinada por la buena opinión que tienen de ti tus amigos.

Si es así, esto es lo que debe saber:

Si sientes que no eres lo suficientemente bueno para ese amigo, entonces tienes que armarte de valor y poner fin a la amistad.

Tu autoestima no debería estar determinada por lo bien que piense de ti tu amigo. Deberías estar lo suficientemente a gusto contigo mismo como para saber que eres lo suficientemente bueno, independientemente de lo que piense esa persona.

Ver también: "Mi marido se pone a la defensiva cuando le digo lo que siento" - 10 consejos si es tu caso

Pero, ¿cómo puedes mejorar tu autoestima? ¿Por qué cosas puedes empezar?

Empieza por ti mismo.

Sé que puede parecer sencillo, pero la clave para tener una autoestima adecuada es reflexionar sobre tus pensamientos, evaluar tus objetivos y pensar en la forma en que quieres hacer las cosas: debe estar determinada por tus propios criterios.

Para ser más precisos, tienes que empezar a construir una relación sana contigo mismo.

Sé que puede sonar confuso, pero eso es lo que aprendí del chamán de fama mundial Rudá Iandê. En su clase magistral gratuita sobre Amor e Intimidad, Rudá comparte algunos consejos prácticos sobre cómo puedes centrarte en tus necesidades y llegar a la raíz de cualquier tipo de problema que tengas en tus relaciones.

Suena impresionante, ¿verdad?

Si es así, ¿por qué no te tomas un tiempo para ver este increíble vídeo gratuito y descubrir cómo puedes hacer frente a esta frustrante y enredada amistad?

Si sientes que tu amigo no es una buena influencia para ti o si la relación no te está aportando ninguna alegría, ha llegado el momento de decir adiós.

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4) Te preocupas constantemente por el bienestar de esta persona

Como ya he mencionado, una señal de que estás en una amistad enredada es descuidar tu propio bienestar. Pero, ¿y si también te preocupas demasiado por el bienestar de la otra persona?

¿Es una señal de que la amistad está muy enredada cuando te preocupas constantemente por el bienestar de tu amigo?

¿Conoces a esa persona que siempre está preocupada por el bienestar de los demás, y a veces se preocupa tanto que se convierte en un problema?

Si tienes un amigo así, lo más probable es que tengáis una amistad enredada.

Un amigo enredado es alguien que viene primero a tu mente, antes de considerar si hay algo malo en él. En otras palabras, significa que estás demasiado centrado en el bienestar de la otra persona.

Por ejemplo, puede que sientas que tu amigo necesita ayuda para resolver sus problemas aunque no te la pida.

Vale, no hay duda de que los amigos están para ayudarse mutuamente a resolver sus problemas. Pero, ¿crees que conoces los problemas de tus amigos mejor que ellos mismos? ¿Sientes que necesitan ayuda para resolver sus problemas aunque no te la pidan?

Intenta responder a estas preguntas porque, sin darte cuenta de que estás dedicando demasiados esfuerzos al bienestar de tu amigo, pierdes de vista tus propios deseos.

Aun así, no estoy diciendo aquí que no debamos preocuparnos por el bienestar de nuestro amigo.

En cambio, puede ser bastante normal preocuparse por tu amigo, sobre todo si le ha pasado algo malo en la vida.

Pero estás constantemente preocupándote por esta persona incluso cuando no hay nada de qué preocuparse. Estás constantemente pensando en la mejor manera de ayudar a este amigo incluso cuando no hay necesidad de ayudarle.

¿Y adivina qué?

Esto es señal de que estás demasiado involucrado con esta persona.

Así que recuérdate a ti mismo que no tienes por qué preocuparte tanto por todo lo que ocurre en la vida de esa persona, sólo tienes que ser un buen amigo.

5) Esta persona demanda constantemente tu atención y tu tiempo

Vale, una cosa es dedicar tu tiempo y esfuerzo a tu amigo tú mismo, pero la otra es cuando tu amigo es el que siempre está reclamando tu tiempo y atención.

Seamos sinceros: se trata de un caso extremo de enredo, que puede ser señal de que estás en una relación malsana.

De hecho, si esta persona te llama todos los días para saber cómo estás o te exige tiempo, puede ser una señal de que te está utilizando como su muleta emocional y no te está dejando crecer para convertirte en la persona que quieres llegar a ser.

Además, esta persona quiere quedar contigo todos los días pero no quiere darte nada a cambio.

Exige constantemente tu atención y tu tiempo, pero no quiere ofrecerte nada a cambio.

Bueno, esta es una gran señal de advertencia.

La razón es que lo más probable es que ese comportamiento te haga sentir que no puedes ser tú mismo cerca de esa persona.

Cuando pasas mucho tiempo con alguien, es fácil querer impresionarle. Y cuando quieres impresionarle, tiendes a comportarte lo mejor posible y a ocultar tus defectos.

Pero si siempre quieres ser otra persona cerca de tu amigo, es señal de que la relación no es sana y necesita solución.

La verdad es que nadie puede hacernos sentir inferiores sin nuestro consentimiento. Y tenemos que cuidarnos a nosotros mismos antes de poder cuidar a los demás, ¿verdad?

Por eso deberías empezar a trabajar en esta amistad ahora mismo. De lo contrario, podrías acabar herido y roto.

6) Te resulta difícil establecer límites con este amigo

Antes he mencionado brevemente la necesidad de límites en cualquier tipo de relación. Y ahora vamos a concretar más.

Aunque suene a paradoja, los límites son necesarios en las relaciones demasiado estrechas. Te ayudan a diferenciar tus necesidades y valores de los de tu amigo y a protegerte de que éste se aproveche de ti.

¿Por qué estoy tan seguro?

Estoy segura porque he leído montones de estudios realizados por psicólogos sociales que demuestran que la clave para que las relaciones sean satisfactorias es saber poner límites.

De hecho, según los estudios, los límites sanos generan confianza en las relaciones, y esto se aplica a todo tipo de relaciones, incluidas las amistades.

Y una amistad sana es imposible sin un alto nivel de confianza, ¿verdad?

Esto significa simplemente que cuando eres capaz de establecer límites con un amigo, hay menos drama en vuestra relación, y tú también te sientes más satisfecho con la amistad.

Pero si tu amigo te pide que hagas tantas cosas, empiezas a sentir que no tienes tiempo para ti.

Esto puede hacer que sientas la necesidad de hacer todo por este amigo sin sentir nunca que tienes derecho a decir que no.

¿Y sabes qué?

Es una clara señal de que vuestra amistad está muy enredada. Tienes que poner límites para poder tener tiempo para ti.

Pero, ¿cómo poner límites en una amistad enredada?

Te diré lo que hago:

En primer lugar, intento averiguar qué quiere ese amigo de mí. Luego me pregunto si es algo que quiero darle.

Si no, entonces se lo digo directamente y con respeto pero con firmeza les digo "no".

Si empiezan a darme la lata y a pedirme que cambie de opinión, les digo "no" una y otra vez, con amabilidad pero con firmeza, hasta que entienden lo que quiero decir.

Sé que no es fácil, pero así es como funciona.

7) Sientes que tienes que andar con pies de plomo a su alrededor

Hablando de tener dificultades para decir "no" a tus amigos, ¿alguna vez has notado que sientes que siempre tienes que andar con pies de plomo a su alrededor?

Siempre te preocupa decir algo equivocado o hacer algo que pueda molestarles. Sientes que no puedes ser tú mismo a su lado porque temes su reacción.

Por ejemplo, puede que no te apetezca pasar tiempo con tu amigo, pero no quieres herir sus sentimientos.

O tal vez sientas que no puedes expresar tu verdadera opinión sobre algo porque les ofenderías.

Pues bien, esto es señal de que tu amigo está enredado contigo: está tan metido en tu vida y en lo que piensa de ella que es incapaz de ver las cosas con objetividad.

Y esto puede acarrear problemas en la amistad.

¿Por qué?

Porque esto tampoco es una amistad sana, y es importante poder relajarte y ser tú mismo cerca de tus amigos.

Lo digo porque sé lo que se siente cuando te cuesta expresarte cuando estás cerca de tu mejor amigo.

Seguro que sabes a qué me refiero.

No sientes que puedas ser tú mismo a su lado. Te das cuenta de que algo no va bien entre vosotros dos, y no es sólo que estén enredados contigo: tampoco sientes que puedas ser tú mismo a su lado.

Te encuentras haciendo cosas para complacerles todo el tiempo, lo que no es justo para ninguno de los dos.

Así que recuerda: no tienes que andarte con pies de plomo con nadie, sea quien sea.

En lugar de eso, deberías intentar aceptar quién eres y ser al 100%, cada uno. Créeme, ¡esa es la clave para vivir una vida con sentido!

8) Siempre tienes que escuchar sus problemas

Déjame adivinar.

Si te encuentras caminando sobre cáscaras de huevo alrededor de tu amigo enredado, entonces apuesto a que siempre tienes que escuchar sus problemas.

Es como si llevaras una insignia que dice: "Háblame de tus problemas, ¡estoy aquí para ti!".

Y como te preocupas por ellos, no quieres que se sientan mal. Así que escuchas. Y escuchas. Y escuchas un poco más.

Pero el problema es que escuchar los problemas de otra persona puede ser agotador, y puede hacerte sentir que la otra persona necesita contarlo todo una y otra vez hasta que se sienta mejor...

¿Y sabes qué?

Esto no es saludable para ninguna de las partes implicadas.

He aquí por qué: escuchar los problemas de otra persona es una forma de validar sus sentimientos, pero no resuelve nada.

Sólo hace que ambos os sintáis mejor en el momento, lo cual es estupendo, pero a la larga no ayudará a tu amigo a resolver sus problemas, porque seguirá dando vueltas contándose a sí mismo todos sus problemas sin resolverlos realmente.

¿El resultado?

Al final del día, te sientes agotado por todos los factores anteriores y por tratar constantemente de gestionar tus propias emociones al interactuar con esta persona.

Por eso tienes que darte cuenta de que es normal no tener fuerzas para escuchar los problemas de tus amigos todo el tiempo.

Y lo que es más importante, no te convierte en una mala persona centrarte en tus necesidades en lugar de descuidar tus deseos y estar ahí para los demás todo el tiempo.

9) Sientes que tu amigo es una prolongación de ti mismo

¿Quieres saber cuál es la señal más fuerte de que estás en una amistad enredada? Sientes que tu amigo es una extensión de ti mismo.

Le explicaré cómo funciona.

En una amistad enredada, no hay separación entre tu amigo y tú. Probablemente sientas que tu amigo te pertenece, y viceversa.

Estáis tan cerca el uno del otro que parece que los dos sois uno, es casi como si compartierais un alma o algo así.

Significa que cuando algo malo le ocurre a tu amigo, también te ocurre a ti, y viceversa. Es casi como si hubiera una sola persona en esta relación en lugar de dos individuos separados.

Así que, aquí está la cosa:

Si sientes que tú y tu amigo sois uno, si piensas "nosotros" en lugar de "yo" o "tú", entonces es que tenéis una amistad enredada.

Ahora te preguntarás: ¿por qué es tan malo sentir que tú y tu amigo sois uno?

La verdad es que es bueno estar tan cerca de alguien, pero sólo hasta cierto punto. Y cuando se está en una amistad enredada, este punto se ha sobrepasado.

En una amistad enredada, los dos se vuelven tan dependientes el uno del otro que uno siente que no puede hacer nada sin el otro.

Veamos un ejemplo:

Digamos que hay un tipo que antes tenía muchos amigos, pero que ahora mantiene una amistad muy estrecha con su mejor amigo. Este tipo se enfada porque su amigo lleva varios días sin llamarle: empieza a sentir que algo malo le ha pasado a su amigo, y también le pasa a él.

Significa que, aunque no le haya pasado nada malo a su amigo, sigue sintiéndose desgraciado por lo ocurrido.

Pero he aquí la cuestión: si tu amigo lleva unos días sin llamarte, no pienses que es porque no le importas.

En realidad, es porque tienen sus propios asuntos de los que ocuparse. Y eso es absolutamente normal.

Por lo tanto, intenta darte cuenta de que la sensación de ser el elegido puede llevar a mucha confusión en una relación.

¿Por qué?

Porque en lugar de apoyarse mutuamente, ambas personas pasan a depender la una de la otra para su propia felicidad, lo cual no es nada saludable.

10) Dejas de hacer cosas porque no las aprueban

Y la última señal, aunque la más común, de estar en una amistad incrustada es que dejas de hacer cosas porque no las aprueban.

Si un amigo te dice constantemente lo que tienes que hacer, cómo tienes que actuar y cómo no tienes que actuar, tienes un problema. Tienes que tener unos límites con tus amigos y proteger tu individualidad.

Esto no significa que no debas estar abierto a sus comentarios, pero sí que debes tener en cuenta sus consejos en lugar de renunciar a todo sólo porque no lo aprueben.

Si tu amistad está muy enredada, sentirás que nada de lo que hagas es lo suficientemente bueno para tu amigo.

Y si los dos estáis lo suficientemente unidos, lo más probable es que esta persona intente impedirte hacer cosas que son importantes para tu crecimiento personal.

Por ejemplo, pueden intentar impedirte que hagas nuevos amigos, que viajes o que hagas cualquier cosa que pueda distraerte de ellos.

Y, obviamente, no es sano. Por eso debes intentar salir cuanto antes de esa relación malsana.

Exploremos, pues, cómo es posible superar una situación tan compleja.

¿Qué se puede hacer con la amistad enredada?

Como puedes ver, las amistades enredadas pueden ser poco saludables y asfixiantes. Si reconoces estos signos en tu relación, puede que estés en una amistad enredada.

Aunque no es necesariamente algo malo, debes ser consciente de ello para asegurarte de que tu relación se mantiene sana.

Si reconoces estas señales en tu amistad, es hora de tomar medidas. No tienes que poner fin a la amistad, pero sí establecer algunos límites.

¿Por qué?

Habla con tu amigo y empieza a establecer límites saludables. No permitas que tu amigo te menosprecie ni que hable por ti.

No permitas que te utilicen para su propio beneficio. No permitas que tomen decisiones por ti. Y no permitas que te manipulen o jueguen con tus emociones.

Si lo intentan, hazles saber educadamente que no lo tolerarás y que es hora de cambiar, tanto en tu relación como en ti mismo.

Sé que puede resultar increíblemente reconfortante tener a alguien de quien depender, pero es importante recordar que la verdadera amistad se basa en el respeto y la confianza mutuos.

Así que, si te cuesta encontrar fuerzas en ti mismo para cambiar tu relación y liberarte de la dependencia malsana de tu amigo, una vez más, te recomiendo que veas la clase magistral gratuita de Rudá Iandê.

Estoy seguro de que sus soluciones prácticas te ayudarán a ponerte en contacto contigo mismo y a construir relaciones satisfactorias y significativas con tus seres queridos.

Vea el vídeo gratuito aquí.




Billy Crawford
Billy Crawford
Billy Crawford es un escritor y bloguero experimentado con más de una década de experiencia en el campo. Le apasiona buscar y compartir ideas innovadoras y prácticas que puedan ayudar a las personas y las empresas a mejorar sus vidas y sus operaciones. Su escritura se caracteriza por una combinación única de creatividad, perspicacia y humor, lo que hace de su blog una lectura interesante y esclarecedora. La experiencia de Billy abarca una amplia gama de temas, incluidos los negocios, la tecnología, el estilo de vida y el desarrollo personal. También es un viajero dedicado, habiendo visitado más de 20 países y contando. Cuando no está escribiendo o viajando por el mundo, a Billy le gusta practicar deportes, escuchar música y pasar tiempo con su familia y amigos.