Cómo seguir la corriente: 14 pasos clave

Cómo seguir la corriente: 14 pasos clave
Billy Crawford

Si hay una lección que he tenido que aprender por las malas, es que la vida es más grande que yo.

Con esto quiero decir que no puedo controlarlo todo.

Por mucho que intente ponerlo todo en cajas ordenadas, y por mucho que intente determinar mi futuro; la vida siempre será más grande que yo.

Es salvaje, caótica e indómita.

En lugar de sentirme frustrada por ello (y créeme, lo he estado), he tenido que aprender a saber qué cosas puedo controlar y aceptar las que no.

He tenido que aprender a seguir la corriente.

Aquí tienes 14 pasos que me ayudan a seguir la corriente, ¡espero que a ti también te sirvan!

Pasos para seguir la corriente

He encontrado 14 pasos para aprender a dejarse llevar. Sé que parece una locura tener un sistema para aprender a soltar el control, así que considerémoslos más como "14 buenas ideas" que como 14 pasos que hay que seguir en orden.

Porque lo que funcionó para mí puede no funcionar para ti. Yo necesité 14, tú puedes necesitar 4.

¡Pero vamos a saltar!

1) Respira

La respiración te conecta a tu cuerpo y a tu mente con el mundo que te rodea. Te ayuda a estar presente, reduce la ansiedad y te permite afrontar la vida con la cabeza tranquila.

¿Te interesa aprender algunas técnicas de respiración? Echa un vistazo al taller online de Ideapod sobre respiración chamánica.

2) Comprender en qué punto se encuentra

Si vas a recablear tu necesidad de control, primero tienes que conocer tus puntos fuertes, tus limitaciones, tus desencadenantes, tus ansiedades, tus luchas y tus sueños.

Tienes que tomarte un tiempo (un momento, una hora, una semana, tú decides) para sentarte contigo mismo y comprender realmente tus defectos y tus puntos fuertes. Después, tienes que preguntarte "¿qué cosas quiero cambiar? ¿Qué cosas tengo la capacidad de cambiar?".

Es importante entender que hay cosas que puedes cambiar (quizá tu actitud) y otras que están fuera de tu alcance. Aceptarlo puede ser difícil, pero es un paso importante.

Por ejemplo, decidí que quería cambiar mi forma de responder a los imprevistos. Quería aprender a dejarme llevar por la corriente. Pero tuve que sentarme conmigo misma para averiguar por qué me resistía tanto a dejarme llevar por la corriente.

Sólo cuando descubrí por qué me resistía tanto al cambio empecé a cambiar mi forma de responder a la vida.

3) Sé consciente

La atención plena es un elemento clave para aprender a dejarse llevar.

¿Qué es la atención plena? Es un tipo de meditación en la que te centras en los pensamientos y sentimientos que experimentas. Eso es todo. No juzgas tus pensamientos y sentimientos como malos o buenos, correctos o incorrectos, sino que simplemente los reconoces y aceptas.

Las prácticas de atención plena han demostrado ser excelentes para reducir la ansiedad. Además, te ayudan a estar en sintonía con tu cuerpo y a comprender cómo influyen en él las fuerzas externas. Una vez que comprendes cómo responde tu cuerpo a los acontecimientos externos, puedes empezar a cambiar tus circunstancias para mantenerte en un estado positivo.

Esta es una parte importante de "Seguir la corriente": saber qué cosas puedes controlar y cuáles no. En este caso, no puedes controlar todos los acontecimientos externos, pero puedes controlar cómo respondes a ellos. Es una lección importante que hay que aprender.

4) Ejercicio

El ejercicio es fundamental para aprender a dejarse llevar.

¿Por qué? Porque te ayuda a gastar energía extra. Cuando estás reprimido, te costará más abrazar la corriente y estarás centrado en cómo imponer tu voluntad al universo.

El ejercicio ayuda a potenciar la creatividad, libera endorfinas (que te hacen sentir bien), reduce el estrés y ayuda a moderar tu energía.

5) Duerma un poco

Dormir es bueno para la salud: ayuda al organismo a repararse, refuerza el sistema inmunitario, mejora el humor, reduce la ansiedad y ayuda a tomar mejores decisiones.

Alíese con su mente. Asegúrese de dormir lo suficiente. Le permitirá afrontar los imprevistos de la vida con una mayor sensación de calma y comprensión.

6) Poner las cosas en perspectiva

Cuando surja un imprevisto, relativízalo. Claro que ese pinchazo sorpresa es un gran fastidio, y sí que la factura va a ser cara, pero ¿va a afectar gravemente a tu vida?

Probablemente no.

Hay un buen truco para poner las cosas en perspectiva: los 10 trucos.

Cada vez que ocurra algo negativo, pregúntate: ¿me seguirá afectando dentro de 10 minutos?

Para ese neumático, sí, probablemente. ¡Y eso apesta!

¿Qué te parecen 10 horas? Bueno, para entonces ya habrás recuperado el coche del taller, ¡así que estás cerca del final!

¿10 días? Quizá estés pagando la factura de la tarjeta de crédito.

¿10 meses? Ni pensarlo.

¿10 años? Lo has olvidado por completo.

Seguro que algunos acontecimientos le afectarán dentro de 10 años, y en ellos debe pensar. Pero la mayoría de las sorpresas no son el fin del mundo. Merece la pena tratarlas con la energía adecuada.

7) Lleve un diario

Recopilar tus pensamientos escribiendo un diario es una forma estupenda de seguir la corriente.

Cada día, tómate un momento para escribir lo que ha sucedido ese día: ¿qué ha sido positivo y qué ha sido negativo?

También me ha funcionado llevar un "diario de la felicidad" en el que clasifico mi día del 1 al 5 (siendo 5 el más feliz), luego escribo 3 cosas buenas que me han pasado y después vuelvo a clasificar mi día.

A menudo, el rango mejorará, simplemente pensando en las cosas felices que han sucedido.

No puedo controlar los acontecimientos que ya han sucedido, pero sí puedo controlar cómo respondo a ellos. De nuevo, se trata de entender lo que puedes controlar y lo que no. Déjate llevar por la corriente en lo que puedas y controla lo que puedas.

8) Valide sus sentimientos

La vida es una locura, ¿verdad? Es un caos, un desorden y una confusión absoluta.

Cuando la vida nos lanza una extraña bola curva, está bien enfadarse, preguntarse "¿por qué ha pasado esto?".

Tus sentimientos son naturales. No debes forzarte a no sentir emociones.

Pero tienes que entender que tus sentimientos no cambiarán los resultados de la vida.

Al contrario, existen para ayudarte a hacer frente a las sorpresas que te depara la vida.

Acepta tu tristeza cuando la vida te deprima, pero sabiendo que saldrás fortalecido del otro lado.

9) ¡Ríete!

Por otro lado, la risa es una forma poderosa de abrazar la locura de la vida. Ríete de la vida, ríete con la vida. Los acontecimientos que escapan a nuestro control a menudo nos parecen tan absurdos, así que por qué no abrazar lo absurdo de ello. Ciertamente no puedes cambiarlo, pero puedes desinflar el miedo y la ansiedad que presenta lo inesperado.

Ver también: 12 señales locas de que alguien te está manifestando (la única lista que necesitarás)

La mayoría de las cosas no son tan serias. Ríete de ellas. Ríete de ti mismo por tomarte las cosas tan en serio.

Te sentirás mejor. Te lo prometo.

10) Darse cuenta de que no se puede controlar todo

Entiendo que este es el corazón de ir con la corriente, pero realmente tienes que construir hasta esto.

Hay cosas en la vida que simplemente no puedes controlar. Tienes que aceptarlo. Seguir la corriente es aceptar que no eres todopoderoso.

Pero, cuando identificas las cosas que no puedes controlar, también aprendes qué cosas puedes controlar.

Mi prometida y yo estamos planeando una boda al aire libre, pero temíamos que la lluvia arruinara el banquete.

No podemos controlar el tiempo. Por muy listos que seamos con el almanaque, eligiendo la fecha y cruzando los dedos; la lluvia llegará o no llegará.

Pero podemos controlar dónde celebramos nuestra boda. Podemos elegir una boda en interior y eliminar ese elemento de ansiedad.

Así que hemos decidido celebrar una boda en interior porque sabemos que no podemos controlarlo todo.

11) Date cuenta de que no puedes controlar a los demás

Al igual que no puedes controlar el tiempo, tampoco puedes controlar las acciones y los pensamientos de los demás.

La gente te sorprenderá. Te cortará el paso en el tráfico. Te enviará flores de la nada. Olvidará ropa en la lavadora y dejará que se enmohezca.

Ver también: 10 cosas que hacer cuando ya no te gusta tu trabajo

Eso no se puede controlar.

En cambio, tú puedes controlar cómo respondes a sus acciones. Eso es lo que tú controlas. Seguir la corriente -especialmente en una relación- es aceptar que estás a cargo de tus propias acciones, y utilizar esas acciones para llegar a un resultado positivo.

12) Día a día

Habrá días en los que no sigas la corriente. Habrá días en los que pierdas la calma cuando te cancelen el vuelo.

No pasa nada. Todos somos humanos, todos fallamos.

No te castigues por tu desliz y, por supuesto, no abandones tu decisión de seguir la corriente. En lugar de eso, acepta que has tenido una reacción negativa y decídete a hacerlo mejor la próxima vez.

No se puede cambiar el pasado, pero se puede aprender de él.

13) Aceptar el cambio y la imperfección

A veces, esa barra de pan en la que has estado trabajando sale del horno un poco grumosa. A veces, en el supermercado sólo hay limas cuando lo que quieres son limones.

Una vez más, no puedes controlar esto, pero puedes controlar tu respuesta a ello.

En lugar de desanimarte porque el pan sea un poco imperfecto, alégrate porque has hecho un pan delicioso. Corta esa hogaza y admira tu trabajo. Échale un poco de mantequilla y saborea su sabor.

Es imperfecto, pero es condenadamente delicioso.

Del mismo modo, coge esas limas y dale rienda suelta a tu creatividad. Quizá consigas algo aún más sabroso, ¡pero no lo sabrás a menos que aceptes el cambio!

14) Ama tu vida

Sólo tenemos una vida, así que no pases la tuya resintiéndote, sino agradeciendo el increíble regalo que te han hecho: ¡estar vivo!

Citando el musical Next To Normal, "no tienes que ser feliz del todo, para ser feliz estás vivo".

La vida va a tener sus altibajos. Y sí, algunos de esos altibajos pueden estar muy abajo. Pueden parecer abismos.

Pero estás aquí. Se te ha concedido el increíble don de experimentar la vida. Abraza cada dimensión de ella, incluso los abismos.

Seguir la corriente es aceptar que la vida es un río. Todos nadamos por su cauce. Podemos balancearnos, chapotear, jugar, ¡incluso pescar! Pero nadar contra la corriente no nos lleva a ninguna parte, sólo nos cansa.

¡Abraza el río! Déjate llevar por la corriente.

¿Qué es el estado de flujo?

Hay una diferencia entre el "estado de flujo" y simplemente "seguir la corriente".

El estado de flujo es un estado en el que completamos una tarea de forma experta sin pensar conscientemente en lo que estamos haciendo.

Es un estado de inmersión total en la tarea que se está realizando, en el que el subconsciente toma el control.

Esto es algo diferente a dejarse llevar por la corriente.

¿Cómo entro en el estado de flujo?

Si tuviera una solución mágica, estaría en estado de flujo horas al día, escribiendo todo lo que pudiera.

Desgraciadamente, no funciona así.

En cambio, requiere un dominio preexistente de una tarea. Tal vez sea tejer, tal vez remar, tal vez dibujar. Sea lo que sea, requiere un alto nivel de competencia en la tarea.

¿Por qué? Porque necesitas construir tus conexiones neuronales hasta el punto de que tu mente subconsciente pueda anular a tu cerebro consciente.

Vea a nuestro fundador, Justin Brown, explicando cómo entrar en el estado de flujo en este vídeo.

¿Cuál es la diferencia entre "dejarse llevar" y el "estado de flujo"?

Cuando solemos hablar de "dejarse llevar", nos referimos a abandonar nuestra incesante necesidad de controlar todos los aspectos de nuestra vida.

Cuando hablamos de "estado de flujo", nos referimos a sumergirnos en una actividad hasta el punto de que nuestra mente subconsciente toma el control.

Sin embargo, hay una similitud clave: ambos requieren una rendición.

Cuando te dejas llevar por la corriente, renuncias a tu deseo de control. Cuando entras en el estado de flujo, entregas tu realización consciente a tu subconsciente. Tu subconsciente toma el control.

¿Puedo seguir la corriente mientras estoy en estado de flujo?

Aprender a abrazar el poder de la rendición es una poderosa fuerza creativa. Piensa en tu mente consciente + su deseo irracional de control como un obstáculo mental.

Seguir la corriente + entrar en el estado de flujo requiere que elimines este obstáculo.

No es una tarea fácil ni se consigue de la noche a la mañana.

Al contrario, requiere dedicación: dedicación a tu pasión y a un cambio de estilo de vida.

Pero no es imposible. Sólo tienes que abrazar la vida.




Billy Crawford
Billy Crawford
Billy Crawford es un escritor y bloguero experimentado con más de una década de experiencia en el campo. Le apasiona buscar y compartir ideas innovadoras y prácticas que puedan ayudar a las personas y las empresas a mejorar sus vidas y sus operaciones. Su escritura se caracteriza por una combinación única de creatividad, perspicacia y humor, lo que hace de su blog una lectura interesante y esclarecedora. La experiencia de Billy abarca una amplia gama de temas, incluidos los negocios, la tecnología, el estilo de vida y el desarrollo personal. También es un viajero dedicado, habiendo visitado más de 20 países y contando. Cuando no está escribiendo o viajando por el mundo, a Billy le gusta practicar deportes, escuchar música y pasar tiempo con su familia y amigos.